La artroscopia es un procedimiento quirúrgico que se usa en Traumatología y Cirugía Ortopédica para diagnosticar y, al mismo tiempo, tratar diversos problemas y enfermedades que se localizan en el interior de una articulación.

Es un método muy poco invasivo, que permite, en general, acortar los tiempos quirúrgico, de ingreso hospitalario y de recuperación postoperatoria pudiéndose conseguir una recuperación mucho más precoz que en caso de una artrotomía.

El diagnóstico es mucho más preciso con la artroscopia que con otros métodos porque obtenemos una visión directa de las diferentes estructuras articulares como el cartílago, la sinovial, los meniscos o los ligamentos supuestamente afectados.

Algunas de las situaciones que más frecuentemente precisan una artroscopia para ser diagnosticadas y/o tratadas son:

▪️ Rotura de ligamentos o de meniscos.
▪️ Desgaste o degeneración del cartílago articular.
▪️ Fragmentos o cuerpos libres de hueso o cartílago en el interior de la articulación.
▪️ Inflamaciones de la membrana sinovial.
▪️ Mala alineación o tendencia a la luxación.
▪️ Rotura o degeneración de tendones.

Las articulaciones donde con mayor frecuencia se lleva a cabo la artroscopia son: la rodilla (la más frecuente), el hombro, el tobillo, la muñeca, la cadera, el codo y, circunstancialmente, otras más pequeñas como la articulación de la mandíbula.

Para más información podéis pasar por nuestra clínica. Estamos en C/Pasos De Santiago, 6, bajo, Murcia (junto a edificios Nueve Pisos) o contacta con nosotros llamando al 722 551 970.